Apple al parecer no quiere quedarse atrás de las nuevas tecnologías que su acérrimo competidor Samsung hace, y es por eso que tiene preparado dar un buen golpe estratégico en lo que se refiere al mercado de los dispositivos celulares o móviles, la gigante de California está trabajando en unas nuevas pantallas con las que acabaría con su dependencia en Samsung. Por ese motivo es que la firma estaría contando con una planta secreta en la que estaría fabricando a pequeña escala, pantallas para ir probándose en diferentes dispositivos móviles de la casa, y que podría cambiar las reglas del juego del mercado.
La empresa tecnológica dirigida por Tim Cook estaría trabajando en una nueva generación de pantallas basadas en la tecnología microLED que, al parecer, equiparían en un futuro no determinado tanto el iPhone como los Apple Watch de la casa. Gracias a este gran avance tecnológico. Apple lograría fabricar dispositivos con pantallas mucho más brillantes, pero lo que resulta más importante, mucho más finos y con una duración de pantalla más elevada. La tecnología microLED permite crear pantallas más finas y exige un consumo energético más bajo, aunque su desarrollo no está resultando nada sencillo.
Tanto es así, que el fabricante consideró abandonar este titánico proyecto hace más o menos un año; sin embargo, parece que las dificultades fueron superadas y el desarrollo de dichas pantallas se encuentra en una fase ya muy avanzado. Con todo, el cambio de tecnología es tan complejo que los consumidores todavía tendrán que esperar algunos años antes de ver dichas pantallas en el mercado.
