Ya Intel nos había informado el año pasado sobre su última y hasta ahora octava generación de procesadores para las portátiles y ultra portátiles, la cual la habían denominado con el nombre de Coffe Lake y cuya arquitectura es de 14nm++, también se anunció esa ocasión la llegada de su nuevo procesador i9 para máquinas de escritorio, pero que ahora llegara por fin a los portátiles para así dar una nueva dimensión al rendimiento de estos dispositivos.
El Core i9-8950HK, tope de gama, puede presumir de ser el primer procesador móvil de Intel con seis núcleos y 12 subprocesos, incorporando la tecnología de incremento de frecuencia en base a la temperatura, lo cual deriva en un total de hasta 4.8 GHz en modo turbo.
Con estos números y características hacen presumir que será suficiente para aquellos usuarios súper exigentes y los mismos no deban de preocuparse por este aspecto cuando no puedan acceder a su equipo principal y deban de trabajar desde un equipo portátil, junto a este peculiar procesador i9, también llegaran las versiones del i7 y del i5
Se puede presumir que estos nuevos procesadores serán además los que Apple utilicen este año para renovar su gama de MacBook Pro, y ya con esto se pondría fin al romance entre estas dos empresas que son Apple e Intel, por lo que la empresa de la manzana ha declarado que se están alistando para ellos mismos fabricar su propia gama de procesadores.
Intel con estos procesadores está queriendo ofrecer una experiencia única para los creadores de contenido y las personas que necesitan un buen rendimiento en videojuegos dentro del ámbito portátil. Cada vez son más los que hacen uso de estas máquinas en lugar de ordenadores de escritorio, por lo que tiene sentido que desde la empresa quieran dar opciones a un ámbito que demanda unas especificaciones cada vez más altas.
En este sentido, los nuevos procesadores serán capaces de ofrecer un rendimiento en juegos hasta un 41% superior a la anterior generación y un 59% en edición de vídeo 4K. Esta expansión de la octava generación llega en un momento en el que nos encontramos esperando a Cannon Lake, los procesadores de Intel que marcarán la entrada en el segmento de los 10 nanómetros y para los cuales aún no hay una fecha de lanzamiento concreta.